“La manera de formar las ideas es lo que da un carácter al espíritu humano. El espíritu que solo forma sus ideas sobre las relaciones reales es un espíritu sólido; el que se contenta con relaciones aparentes es un espíritu superficial; el que ve las relaciones tal y como son es un espíritu justo; el que las aprecia mal es un espíritu falso; el que inventa relaciones imaginarias que no tienen ni realidad ni apariencia es un loco; el que no relaciona nada es un imbécil”.
Jean-Jacques Rousseau