El poeta no toma vino,
bebe parsimoniosamente la sangre de Cristo.
El poeta no come,
devora a la vida con pasión.
El poeta no fuma habanos,
hace señales de humo para otros pueblos.
El poeta no mira a las mujeres,
hace que ellas lo miren a él.
El poeta no tiene relaciones sexuales,
protege a la mujer con su cuerpo.
El poeta no regala flores,
prefiere verlas vivir naturalmente.
El poeta no camina,
avanza bailando tango.
El poeta no habla,
siempre está recitando.
El poeta no duerme,
sueña.
El poeta no tiene amigos,
se rodea de hermanos.
El poeta nunca está encerrado,
es un escapista profesional.
El poeta no sabe obedecer,
es un obsesivo libertador.
El poeta no cree en el Cielo,
jura haberlo visto.
El poeta es un guerrero,
da la vida por la paz.
El poeta no escribe,
derrama su sangre.
El poeta no muere,
se va a vivir con Dios.